La etapa adulta trae consigo momentos de crisis, asumir más responsabilidades, tomar decisiones, perdidas, resolver conflictos, etc.

Muchas veces, intentamos afrontar y resolver estas situaciones y sentimientos difíciles de entender pero a veces nos sentimos desbordados.

Un acompañamiento profesional facilita la transformación y la capacidad de salir beneficiosos de estos tediosos procesos.

Ansieda, Estrés. Depresión. Apatía, Adicciones, Miedos y Fobias, Insomnio, Duelo.

– Preocupación excesiva y obsesiones.
– Baja autoestima y habilidades sociales.
– Separación o divorcio.
– Disfunciones sexuales.
– Transtornos de la Conducta Alimentaria.
– Problemas de salud y manejo del dolor.
– Dificultad de atención, concentración y memoria.
– Problemas de adaptación al trabajo y acoso laboral.